«Castronela oé»: así es el grito de castrexos y de romanos en el Friulio de Friol

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS FRIOL / LA VOZ

LUGO

Óscar Cela

La fiesta de recreación histórica triunfa un año más con un variado programa del que disfrutan vecinos y forasteros

11 may 2024 . Actualizado a las 18:19 h.

«Temos o fillo desfilando aí, na guerra». El comentario que hacía este sábado un hombre a una pareja en Friol era mucho más agradable del que se puede hacer en Ucrania o en Palestina. En la localidad se libra algo así como una batalla por el control del río Narla, pero las escaramuzas teóricamente bélicas van intercaladas de amplios períodos de tregua en los que se disfruta de actividades, se mueven las mandíbulas y se refresca el gaznate.

Ese último detalle resulta especialmente importante porque castrexos y romanos luchan este fin se semana en Friol bajo un sol mucho más veraniego que primaveral, aunque el remedio se encuentra fácilmente: tanto cerca de los campamentos como en el casco urbano hay lugares donde legionarios teóricamente invasores y nativos supuestamente resistentes pueden luchar contra un enemigo común como la sed.

Castrexos y romanos tienen sus campamentos instalados a pocos centenares de metros de distancia, lo que permite al espectador, sea vecino del municipio o visitante dispuesto a incorporar al turismo un paseo por la historia, contemplar las formas de vida de unos y de otros sin un fatigoso recorrido. Y no solo se pueden ver campamentos o armaduras, sino que entre los asentamientos de castrexos y de romanos y el centro de la villa hay una variada oferta de artesanía, con objetos elaborados en tela o en madera.

Como en años pasados, el Concello convocó un concurso de ornamentación de escaparates y de fachadas, cuyos premios se entregan este domingo, Pero hay algunos casos en los que la decoración va acompañada de una caracterización más amplia, como mostraba este sábado a mediodía la carta de un céntrico negocio de restauración, que ofrecía un menú castrexo y otro romano. En el primero se podía empezar con mejillones o con ensaladilla y tomar luego rabo en salsa o merluza en salsa. El segundo constaba de espaguetis con gulas o de calamares (a la romana, claro) de primero y de lubina a la plancha o de pollo con salsa de huevo duro y vino tinto de segundo. En el precio, nada de discriminación: uno y otro costaban lo mismo.

PROGRAMA DEL DOMINGO

  • 11.00                  Apertura del asentamiento galaico y del campamento romano
  • 11.00                  Apertura del mercado
  • 11.10                  Preparación de porco celta
  • 11.15                  Demostraciones de telar castrexo, orfebrería, hilado y comercio castrexo
  • 11.15                  Taller de telar
  • 11.15                  Tiro con macheta
  • 11.15                  Obradoiro de barro y de pintura castrexa
  • 11.15                  Obradoiro de Lorica Hamata y «Alimentación nas lexións»
  • 11.15                  Ordine Mutatio
  • 12.00                  Boda celta
  • 13.00                  Liorta polo tesouro do castro Friulio
  • 14.00                  Entrega de premios del concurso de escaparatismo y de fachadas
  • 14.00                  Nombramiento de Persoeiro de Honra a la Asociación Cultural Carballo Vivo
  • 20.00                  Clausura

El papel que realiza la asociación friolesa A Castronela fue reconocido públicamente. El presidente, Jesús Penín, recogió un obsequio de manos del alcalde, José Ángel Santos, después de que colectivos de Galicia y de otras comunidades autónomas hubiesen sido también agasajados por su presencia en el Friulio y por su aportación para que la fiesta, que este año cumple seis ediciones, vaya creciendo. El regidor también agradeció la presencia de representantes municipales de Lugo y de Cambre.

«Grazas a todos vós»

Desde el palco de la plaza Andón Cebreiro en la que se habían entregado los obsequios de reconocimiento, Santos habló a los presentes con tanta convicción como lo haría un senador en Roma. «Grazas a todos vós», dijo. Mientras tanto, los asistentes, fuesen castrexos o romanos, tenían una forma de expresar su satisfacción compartida por la fiesta. «Castronela oé, Castronela oé, Castronela oé, Castronela oé oeeé», coreaban.

El presidente de A Castronela también pronunció unas palabras, que parecían ir dirigidas a castrexos y a romanos; dio las gracias al Concello y a las asociaciones que colaboran para que el festejo tenga lugar cada año, y aportó también una clave para que quienes desfilan, como el hijo de ese padre que comentaba detalles en una conversación, no vayan a la guerra sino más bien a un fin de semana de diversión: el Friulio, dijo, es «unha gran familia».

El presidente animó a todos a seguir trabajando para que la fiesta continúe en línea ascendente. Si sus palabras son atendidas, no hay duda de que seguirá creciendo el Friulio, tal como comentaba este sábado a mediodía una visitante en el campamento romano: «Esto cada año va a más», dijo.